El póker es el juego de cartas de torneo más popular del mundo. Últimamente, cada vez más jugadores de póquer han recurrido al póquer en línea, donde cada semana se disputan decenas de torneos con elevados premios. Pero para establecerse en el mundo del póquer, un recién llegado necesita aprender lo básico.
El juego se menciona por primera vez en el siglo XVI y se juega desde hace más de 450 años. El juego se originó en Europa, con jugadores de Francia, España e Italia discutiendo sobre quién inventó el póquer. Las reglas del juego se han ido modernizando a lo largo del tiempo, alcanzando el estándar actual sólo en el siglo XIX. En Estados Unidos, en cambio, el juego se dividió en varias variantes, algunas de las cuales recibieron el nombre de estados.
El póker es un juego de cartas en el que el objetivo del jugador es ser el único en la mesa. Esto se puede conseguir tanto recogiendo combinaciones ganadoras como faroleando. Antes de comenzar el turno, se reparten dos cartas boca arriba. Sólo el jugador conoce el valor de las cartas. Posteriormente, el croupier reparte cinco cartas alternativamente, y el jugador debe permanecer como único jugador en la mesa por todos los medios disponibles.
Antes de empezar a jugar al póquer, muchos profesionales calientan meditando, practicando y decidiendo su estrategia para la partida.
El póker es un juego con un alto nivel de entrada, lo que lo convierte en el juego de torneo de cartas más popular. El jugador no sólo tiene que memorizar las combinaciones, sino también aprender algunos términos importantes. Hay hasta unos cientos de términos en el juego, dependiendo del tipo de póquer, pero unos pocos básicos son esenciales en cada variedad:
Sin entender y aprender estos términos, un jugador no debería entrar en el póker.
Debido a las diversas variedades de póquer, se utilizan barajas completamente diferentes de una partida a otra.
Otro detalle crucial que hay que aprender son las combinaciones que un jugador puede hacer.
Si alguna de las cartas de la mesa es igual, gana la de mayor rango.
Después de aprender las reglas, un principiante puede empezar a jugar. Antes de empezar, deberías ver algunos torneos, para entender la mecánica básica del juego. El comercio también es importante.
Un intercambio es una lista de términos que un jugador utiliza para que el crupier entienda lo que el jugador quiere hacer con su bote.
El comercio es uno de los aspectos clave del juego del póquer. Sin una buena capacidad de regateo, un jugador corre el riesgo de perder todo el bote y abandonar el juego.
Un error común que cometen la mayoría de los nuevos jugadores es aceptar todas las ofertas. El jugador debe aprender a dejar pasar las jugadas que no son rentables. Cualquier dinero en el póker es importante.
Los jugadores experimentados son capaces de detectar de antemano cómo se comportan los competidores en la mesa en situaciones de empate. Los principiantes no tienen esa experiencia, por lo que actúan sólo en función de sus propias fuerzas y de alguna experiencia adquirida durante el juego, lo que no siempre es correcto.
También es típico que los principiantes suban sin cesar sus apuestas durante el juego. Los profesionales fijan su propio bote y actúan únicamente en función de él, estableciendo apuestas mínimas y máximas. Los principiantes, en cambio, no tienen límites.
La única manera de evitar estos errores es la experiencia. Incluso los líderes del mercado del póquer empezaron una vez desde abajo y no entendieron cómo actuar en los momentos difíciles del juego. La práctica es el mejor enfoque para el mejor juego de cartas del mundo.