Bill Zender, que ha trabajado como especialista en la Autoridad del Juego de Nevada, puede hablarle de los juegos de casino como nadie. El estadounidense ha publicado tres libros con consejos para principiantes y profesionales.
En primer lugar, el jugador debe olvidarse de los casinos en línea. Son deshonestos y actúan únicamente en función de sus intereses. El mercado está saturado y es extremadamente inestable, y a los propietarios de máquinas tragaperras online no les importa su reputación. También incluyen los casinos sin licencia de juego, que están diseñados únicamente para su propio beneficio.
En ellos, el jugador no sólo pierde todo su dinero, sino que apoya el juego ilegal con cada apuesta. Estos casinos evaden impuestos y se aprovechan de la manía de la gente.
En Rusia, la actividad de los casinos está regulada desde hace tiempo. Las máquinas tragaperras clandestinas son cada vez menos, y su popularidad está cayendo. Se han establecido un total de cuatro zonas de juego en Rusia:
Cada una de estas zonas de juego cumple con los requisitos de la legislación rusa.
Bill rara vez se ha encontrado con distribuidores de calidad. Según él, no hay más de 100 profesionales en el mundo. Por lo tanto, antes de jugar al blackjack, el jugador debe decidirse por el crupier más inexperto, en su opinión, del casino. En ocasiones, el propio Zender se ha encargado de llevar un diario de los croupiers que a menudo muestran a los jugadores sus cartas y cometen errores.
No querrás distraerte con chicas de striptease y crupieres en bikini. Estos trucos se utilizan para que el jugador pierda la concentración. A menudo, el casino puede reducir las probabilidades de ganar, lo que el usuario puede no notar debido a las distracciones.
Al igual que en las apuestas, los casinos tienen un cierto margen que permite a los propietarios del establecimiento ganar en la distancia. Se dice que la ruleta tiene un 5% de ventaja sobre el jugador. Un cliente de un establecimiento puede ganar la primera, la segunda e incluso la tercera vez, pero seguramente perderá una vez. Saber cuándo hay que renunciar es una de las claves para mantenerse en la brecha.
Según las observaciones de Zender, las máquinas tragaperras no son la mejor manera de ganar dinero. El propio Bill los utilizaba sólo como entretenimiento. Sin embargo, si un jugador decide intentar ganar dinero con las máquinas tragaperras, se le aconseja que juegue con el máximo de fondos y que vaya con una apuesta de cinco dólares o más.
La posibilidad de que el jugador gane en el keno es la menor posible. En algunos casinos, el margen de victoria del croupier es de hasta el 35%, y, según recuerda Zender, nadie ha conseguido adivinar los 20 números.
Bill ha escrito sobre cómo la ventaja mínima del casino es sólo en el video póker. Allí, el jugador tiene la mejor oportunidad de ganar, pero el casino sigue ganando, incluso con un 0,5% de ventaja. Esto se debe a la mala formación de los jugadores. Cuanto más conocimiento tenga el jugador sobre el póquer, más posibilidades tendrá de ganar, ya que el azar es extremadamente raro.
Algunos casinos retiran los relojes de pulsera a los crupieres para evitar que los jugadores lleven la cuenta del tiempo. La mejor manera de salir de esta situación es con un reloj de pulsera de calidad y un reloj que sea exactamente el adecuado para el aseo. Las bebidas gratis son otro truco del casino. Los propietarios comprenden lo mucho que puede perder un jugador, por lo que intentan prolongar su estancia en las mesas el mayor tiempo posible con bebidas y golosinas gratuitas.